En literatura, hay cientos de finales, algunos felices, otros tristes. Algunos finales tienen un giro. Algunas historias abren la puerta para algo más. Los cuentos de hadas terminan cuando la chica consigue al príncipe, y luego, está ese final que has visto venir desde lejos y por alguna razón, te toma por sorpresa. Porque siempre existirá el lobo que interrumpa tu camino y la bruja que transforme las sonrisas en llanto, pero solo si confías realmente en tu historia, podrás vivir el “felices por siempre”